Partager

Migrations et développement

República Dominicana se beneficiaría de integrar mejor la migración en sus estrategias de desarrollo nacionales y sectoriales, según el nuevo informe del Centro de Desarrollo de la OCDE –UNIBE

 

La República Dominicana tiene una larga tradición de migración y en las últimas décadas, el país ha experimentado flujos significativos tanto de inmigración como de emigración. Cerca del 12% de la población dominicana vive en otro país, mientras que los inmigrantes constituyen el 4% de la población y una parte importante de la fuerza de trabajo. El país obtendría un mayor beneficio del fenómeno migratorio si a todas las instancias de gobierno se asumiera la migración como  una parte integral de su estrategia de desarrollo, según lo destaca el nuevo informe del Centro de Desarrollo de la OCDE y el Centro de Investigaciones y Estudios Sociales (CIES) titulado Interacciones entre Políticas Públicas, Migración y Desarrollo (IPPMD) en República Dominicana.

El Ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Isidoro Santana Lopez, junto al Centro de Desarrollo de la OCDE y el Centro de Investigaciones y Estudios Sociales presento dicho reporte en la ciudad de Santo Domingo hoy, ante la presencia de la Delegación de la Unión Europea en la República Dominicana, así como varios Ministros y representantes de la sociedad civil y organismos nacionales e internacionales.

El estudio IPPMD en República Dominicana es el resultado de cuatro años de trabajo de campo, análisis empírico y diálogos con los responsables de políticas públicas en el país. En total, más de 2.000 hogares representando más de 7 000 individuos y 54 comunidades fueron entrevistados durante este ambicioso proyecto, cofinanciado por la Unión Europea. Los hallazgos se basan en encuestas cuantitativas y cualitativas innovadoras que, por primera vez, combinan cuestiones relacionadas con la migración y las políticas públicas. El informe es parte de un proyecto comparativo más amplio en el que participaron otros nueve países: Armenia, Burkina Faso, Camboya, Costa Rica, Costa de Marfil, Filipinas, Georgia, Haití y Marruecos.

Las interacciones entre las políticas sectoriales y la migración son complejas, y dependen en gran medida del contexto del país y de cómo se aplican las políticas. A través de diversas dimensiones - inmigración, emigración, remesas y migración de retorno -, la migración tiene efectos positivos y negativos en sectores clave de la economía dominicana. Del mismo modo, las políticas sectoriales tienen repercusiones indirectas sobre la migración y los resultados de desarrollo vinculados. La falta de alineación y correspondencia en dichas políticas puede incluso tener efectos no deseados y socavar la eficacia de las políticas públicas.

Por ejemplo, a menudo se supone que tanto las políticas como los programas de formación profesional reducirán los incentivos de las personas a emigrar al hacerlas más aptas para conseguir un empleo. Sin embargo, el análisis de IPPMD muestra lo contrario: los individuos que participaron en programas de formación profesional y técnica son más propensos a planear emigrar en el futuro (21%) que aquellos que no lo hicieron (13%) - potencialmente porque esto capacita a los migrantes con habilidades que son más útiles y valoradas en el mercado de trabajo internacional que en el local.

Los hallazgos también muestran que la migración tiene efectos positivos y negativos sobre los resultados educativos. La migración de retorno fomenta las inversiones en educación, y en particular en la educación privada: el 43% de los niños que viven en hogares de migrantes de retorno asisten a escuela privada, en comparación con el 17% de otros hogares. Al mismo tiempo, los jóvenes inmigrantes en la República Dominicana no tienen acceso a la educación en la misma medida que sus pares nativos. Los jóvenes de los hogares con inmigrantes tienen menos probabilidades de asistir a la escuela y los hogares de inmigrantes tienen menos probabilidades de beneficiarse de los programas de educación gubernamental que los hogares sin inmigrantes. La intervención del gobierno es entonces clave para reducir las desigualdades en el sector educativo. La inversión en infraestructura educativa para satisfacer la creciente demanda de educación y asegurar que los inmigrantes tengan acceso a programas de políticas educativas es clave para la integración de los inmigrantes y lograr el objetivo de educación universal establecido en la Estrategia Nacional de Desarrollo.

En general, el informe IPPMD de República Dominicana concluye que el desarrollo potencial de la migración no se ha realizado plenamente. Para aprovechar al máximo la migración, se requiere crear un ambiente donde los dominicanos migren por decisión propia, y donde tanto los emigrantes como los inmigrantes puedan contribuir positivamente al desarrollo en República Dominicana así como en los países de destino. En ese orden de ideas, una recomendación orientada a optimizar los beneficios de la migración es evitar que los hacedores de políticas públicas operaren  aisladamente y procuren integrar la migración en las estrategias nacionales de desarrollo en República Dominicana. Esto implica no solo adoptar iniciativas específicas centradas en la migración y el desarrollo, sino también incluir la migración en el diseño, aplicación y evaluación de todas las políticas sectoriales relevantes.

 

Para más información sobre el Proyecto IPPMD, favor visite: http://www.oecd.org/dev/migration-development/ippmd.htm.

Las solicitudes de entrevistas o una copia del informe deben dirigirse a Lisa Anderson (lisa.andersson@oecd.org); +33 (0)1 45 24 74 93) al Centro de Desarrollo de la OCDE.

 

Documents connexes